Una encantadora gata llamada Macy, y sus 10 adorables gatitos, fueron llevados al centro de rescate Humane League of Lancaster County en Pennsylvania, para ofrecerles la oportunidad de una vida mejor como gatitos de interior. Algunos de los felinos eran de una camada diferente, que la dulce gata había decidido criar como suyos.
Una persona de buen corazón que encontró a la gata callejera y a sus bebés decidió ofrecer un poco de ayuda. Trató de encontrar a la otra madre gata, pero logró darse cuenta de que Macy ya había comenzado a cuidar a todos los bebés como una gran familia mixta.
Wilma, voluntaria de acogida de Humane League of Lancaster, le dijo a Love Meow:
«Macy ha estado cuidando a los diez desde entonces. Es madre de dos camadas de gatitos combinados».
Gata callejera adoptó a una camada de gatitos y los cría junto a los suyos
Al principio, Macy era un poco tímida y parecía estar asustada después de todo lo que había vivido en su pasado, pero rápidamente se instaló en su nuevo hogar y se sintió como en casa en su cálido nido. La felina se relajó mientras estiraba sus patitas y estaba rodeada por sus diez gatitos.
Wilma cuenta:
«Su personalidad dulce y tierna no tardó mucho en brillar».
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Al pasar las primeras semanas, Macy se dedicó por completo a cuidar de sus bebés. Ella atendía a cada uno con amor y cumplía todos sus caprichos sin molestarse ni un poco.
La voluntaria dice:
«Ella acepta mi ayuda con sus bebés. Le encanta que le presten atención y que la carguen, por lo que es posible que haya tenido bastante experiencia de estar rodeada de humanos de una manera positiva».
Para ayudar a la mamá gata con su carga, Wilma complementó a los gatitos dos veces al día con biberón para asegurarse de que todos los bebés estuvieran bien alimentados y cuidados.
Fue un trabajo en equipo ya que la voluntaria y la gata alternaban entre las labores de mamá. Luego de alimentar y pesar a los bebés Wilma los dejaba de nuevo en el nido junto a Macy.
Wilma asegura:
«Macy es una mamá fenomenal para todos sus bebés, y es infinitamente paciente y atenta. No hay forma de saber qué gatitos son suyos y cuáles de la otra camada, y los trata exactamente igual».
Ahora, los pequeños gatitos tienen alrededor de 4,5 semanas, ya están aprendiendo a conocer sus habilidades con la caja de arena, y han comenzado a comer comida para gatos grandes.
Estos esponjosos chicos están entrando en la fase adolescente, son más activos, curiosos y traviesos. Están mostrando interés por los juguetes, y jugar a las luchas se ha convertido en todo un deporte.
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Cuando Macy necesita tomar un descanso de los gatitos y sus labores maternales, los diez se reúnen en el regazo de su madre de acogida y casi de inmediato activan sus motores de ronroneo al unísono.
Macy adora a su familia y ama su vida como gata de interior, suele disfrutar de cada oportunidad junto a sus humanos para recibir algunas caricias en la cabeza y abrazos. Tan pronto como termine con sus deberes de mamá, será esterilizada y encontrará una familia amorosa para ser feliz por siempre.