Tyler Bandy es un chico de 10 años de edad que recibió hace poco una de las mejores noticias que pudo imaginar. Al cruzar la puerta de regreso a casa, el niño rompió en llanto cuando sintió las caricias de su perro perdido hace un tiempo; no podía creer que Bruiser, su amigo finalmente estuviera de nuevo en casa.
Bruiser, el adorable perro pitbull de pelaje gris y blanco, estaba paseando en enero cuando se perdió. El perro vive junto a su familia en la Florida, Estados Unidos, siempre fue muy unido a Tyler, quien se encontraba bastante abrumado desde la desaparición de su mejor amigo.
De acuerdo con The Dodo, la familia de Bruiser hizo todo lo posible para encontrarlo. Repartieron volantes por todo su vecindario, y Jamie Bandy, la madre de Tyler, publicó en Facebook fotografías suyas, y constantemente llamaba al control de animales local.
Niño rompe en llanto cuando vuelve a ver a su perro
Pero al no obtener ninguna información, y a medida que avanzaban las semanas y no se encontraban pistas, o alguna noticia de Bruiser, la familia empezaba a perder las esperanzas de recuperarlo.
Pronto esta incertidumbre tendría un fabuloso desenlace para Bruiser y su amada familia. Finalmente, y después de un par de meses, llegaron noticias a casa de la familia Bandy acerca de su mascota.
En su cuenta oficial de Facebook, Highlands County Sheriff’s Office realizó una publicación y escribió:
«Hace un par de meses, una familia que vive cerca de Fort Meade perdió a su perro después de que huyó persiguiendo a un conejo… Resulta que su perro había sido recogido por alguien en su camino al condado de Highlands y, después de un par de meses, terminó en manos del personal de Animal Services».
Al parecer, a Teri Dosil, quien es miembro del personal de los servicios de animales le parecía familiar el rostro del perro y, después de buscar en las redes sociales, descubrió que se trataba de Bruiser.
Por supuesto, el perro inmediatamente fue devuelto a su familia, pero mantuvieron en secreto todo acerca de su llegada para sorprender a Tyler.
La emoción del chico al llegar a casa, y encontrar a su amado Bruiser esperándolo fue lo mejor de su día. Tyler lloraba de la felicidad y no dejaba de abrazar a su mejor amigo; por supuesto Bruiser estaba igualmente emocionado y lamía el rostro de su humano, mientras su cola se agitaba alegremente.
En su publicación Highlands County Sheriff’s Office, finalmente escribió:
«Decir que Bruiser tuvo un feliz regreso a casa sería ponerlo a la ligera. Tyler, que tiene 10 años, simplemente se sintió abrumado cuando sus padres lo sorprendieron con su mejor amigo. Los dos han sido inseparables desde entonces».